Herschel
Herschel desvela el interior del corazón del Águila
![]() © ESA and the SPIRE & PACS consortia, P. André (CEA Saclay) for the Gould’s Belt Key Programme Consortia
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Esta imagen muestra una nube oscura 1000 años luz de distancia en la constelación de Aquila, el Águila. Cubre un área de 65 años luz de diámetro y está tan envuelta en polvo que ningún satélite anterior ha sido capaz de ver en ella. Ahora, gracias a una sensibilidad superior de Herschel en la más larga longitud de onda de infrarrojos, los astrónomos tienen su primera imagen del interior de esta nube.
Esta impresionante imagen fue tomada el pasado 24 de Octubre con dos de los instrumentos de Herschel: PACS (Photodetector Array Camera and Spectrometer) y SPIRE (Spectral and Photometric Imaging Receiver). Las dos regiones más brillantes son zonas donde las estrellas en formación más grandes hacen brillar el hidrógeno gaseoso.
La nueva página web ‘OSHI’, que se inaugura hoy, mostrará las mejores imágenes tomadas por Herschel. En ella se irán publicando estas impresionantes fotografías del cielo en infrarrojo a medida que avance la misión. Cada imagen estará acompañada por una completa descripción que facilitará su uso por los medios de comunicación, los educadores y el público en general.
En el interior de los filamentos de polvo que se pueden ver en la imagen del Aquila hay 700 cúmulos de polvo y gas que se irán transformando en estrellas. Los astrónomos estiman que unas 100 son protoestrellas, en la fase final de su formación. Tan sólo necesitan comenzar el proceso de fusión nuclear en su interior para ser consideradas auténticas estrellas. Los otros 600 objetos todavía no están suficientemente desarrollados como para ser considerados protoestrellas, pero algún día también llegarán a formar una nueva generación de astros.
Este cúmulo forma parte del Cinturón de Gould, un gigantesco anillo de estrellas que rodea el cielo nocturno – nuestro Sistema Solar se encuentra cerca de su centro. El primer astrónomo en descubrir esta inusual alineación de estrellas a mediados del siglo XIX fue el inglés John Herschel, el hijo de William Herschel, en honor del que se bautizó el telescopio Herschel de la ESA. Sin embargo, fue Benjamin Gould, natural de Boston, el que resaltó su importancia en 1874.
Las estrellas más brillantes de muchas constelaciones, tales como Orión, Escorpio o la Cruz del Sur, pertenecen al Cinturón de Gould, donde también se encuentran varios cúmulos cercanos, muy apropiados para el estudio de los astrónomos. La observación de estos cúmulos de formación de estrellas es uno de los objetivos principales de Herschel, con el que se pretende descubrir la demografía de la formación de estrellas y de sus orígenes, es decir, la cantidad de estrellas que se pueden formar y el rango de masas que pueden alcanzar las estrellas recién nacidas. Además de esta región de Aquila, Herschel observará otras 14 regiones de formación de estrellas dentro del Programa de Observación del Cinturón de Gould.
Fuente: ESA - Agencia Espacial Europea
Herschel
Herschel desvela el interior del corazón del Águila
![]() © ESA and the SPIRE & PACS consortia, P. André (CEA Saclay) for the Gould’s Belt Key Programme Consortia
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Esta imagen muestra una nube oscura 1000 años luz de distancia en la constelación de Aquila, el Águila. Cubre un área de 65 años luz de diámetro y está tan envuelta en polvo que ningún satélite anterior ha sido capaz de ver en ella. Ahora, gracias a una sensibilidad superior de Herschel en la más larga longitud de onda de infrarrojos, los astrónomos tienen su primera imagen del interior de esta nube.
Esta impresionante imagen fue tomada el pasado 24 de Octubre con dos de los instrumentos de Herschel: PACS (Photodetector Array Camera and Spectrometer) y SPIRE (Spectral and Photometric Imaging Receiver). Las dos regiones más brillantes son zonas donde las estrellas en formación más grandes hacen brillar el hidrógeno gaseoso.
La nueva página web ‘OSHI’, que se inaugura hoy, mostrará las mejores imágenes tomadas por Herschel. En ella se irán publicando estas impresionantes fotografías del cielo en infrarrojo a medida que avance la misión. Cada imagen estará acompañada por una completa descripción que facilitará su uso por los medios de comunicación, los educadores y el público en general.
En el interior de los filamentos de polvo que se pueden ver en la imagen del Aquila hay 700 cúmulos de polvo y gas que se irán transformando en estrellas. Los astrónomos estiman que unas 100 son protoestrellas, en la fase final de su formación. Tan sólo necesitan comenzar el proceso de fusión nuclear en su interior para ser consideradas auténticas estrellas. Los otros 600 objetos todavía no están suficientemente desarrollados como para ser considerados protoestrellas, pero algún día también llegarán a formar una nueva generación de astros.
Este cúmulo forma parte del Cinturón de Gould, un gigantesco anillo de estrellas que rodea el cielo nocturno – nuestro Sistema Solar se encuentra cerca de su centro. El primer astrónomo en descubrir esta inusual alineación de estrellas a mediados del siglo XIX fue el inglés John Herschel, el hijo de William Herschel, en honor del que se bautizó el telescopio Herschel de la ESA. Sin embargo, fue Benjamin Gould, natural de Boston, el que resaltó su importancia en 1874.
Las estrellas más brillantes de muchas constelaciones, tales como Orión, Escorpio o la Cruz del Sur, pertenecen al Cinturón de Gould, donde también se encuentran varios cúmulos cercanos, muy apropiados para el estudio de los astrónomos. La observación de estos cúmulos de formación de estrellas es uno de los objetivos principales de Herschel, con el que se pretende descubrir la demografía de la formación de estrellas y de sus orígenes, es decir, la cantidad de estrellas que se pueden formar y el rango de masas que pueden alcanzar las estrellas recién nacidas. Además de esta región de Aquila, Herschel observará otras 14 regiones de formación de estrellas dentro del Programa de Observación del Cinturón de Gould.
Fuente: ESA - Agencia Espacial Europea